¿Te pasó alguna vez esa ansiedad de que nunca llegás?
¿De que nunca es suficiente?
Quizás te pasó de estar haciendo lo que sentís que podés, lo que elegiste, pero de repente estás expuesto a un montón de estímulos constantes de otras personas.
De otras marcas mostrándote lo que hacen y, muchas veces, esa ansiedad se manifiesta en un "che, pará, yo estoy haciendo esto y este otro está haciendo eso y vendió más, y este otro…".
Así, nunca parece ser suficiente. Terminás saliendo de tu foco, de tu estrategia porque te distraés con lo que hacen los demás.
Es una de las cuestiones que primero manifiesto en Ecodiem cuando arrancan, o en los webinars.
Ojo con esto.
Emprender es un proceso largo, desarrollar un negocio que te permita vivir, uno que disfrutes y que sea rentable, es un proceso. Ni siquiera es un fin en sí mismo.
Cuando llegaste al lugar que creías que, si llegabas, te ibas a relajar, te das cuenta de que hay otro desafío.
La única que nos queda es disfrutar del proceso.
Empezar a asociar en tu cabeza los momentos más difíciles, los mayores desafíos, con los momentos de crecimiento.
Lo veo en los casos de éxito, les pasaba eso. Veían a otros y querían estar ahí, del otro lado.
Cuando se enfocaron en ellos, en sus estrategias, en sus negocios, lograron el crecimiento que querían (y siguen haciéndolo).
Porque para eso estamos nosotros, para guiar, para enseñar.
Para que, por ejemplo, crezcas de 200 a más de 600 pares mensuales como lo hicieron los chicos de Aforeux. Con pasión, compromiso y las herramientas específicas para optimizar su presencia online y aumentar las ventas.
Recordá esto: un emprendimiento es la excusa. Lo que hacemos es una excusa para hacer lo que nos gusta. No pierdas ese foco.
No te compares, hacé tu propio camino y disfrutalo.
Un saludo,
Rodri.
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