En un momento, todo dueño de e-commerce se da cuenta de algo:
Que no se puede con todo.
Que si el negocio avanza pero vos no tenés vida… no estás creciendo.
Te estás desgastando.
Y ahí aparece una decisión clave: volver al propósito.
¿Por qué empezaste con esto?
¿Qué estilo de vida querés tener?
¿Cómo querés que se sienta trabajar en tu empresa todos los días?
Muchas veces renunciamos a la posibilidad de vivir mejor.
Nos acostumbramos a correr.
A sostener todo.
Pero tarde o temprano, el cuerpo, la mente o el negocio te lo hacen saber.
Tu empresa es un reflejo.
De tu energía. De tus decisiones.
De cómo estás por dentro.
Y cuando vos madurás, el negocio también lo hace.
Por eso, si sentís que algo ya no te cierra, que te está pidiendo una nueva versión tuya… prestá atención.
Ahí puede estar el próximo salto.
En Ecodiem te ayudamos a darlo: a enfocarte en lo que importa, a crecer con estrategia según tu propósito.
Nos vemos adentro,
Rodri.
No hay comentarios:
Publicar un comentario