Ya podés ver el nuevo caso de éxito.
Ayrun es una marca de ropa deportiva que decidió dejar de improvisar.
Esto fue algo que me dijeron en la entrevista:
"No comunicábamos bien nuestro producto, sabíamos que era bueno, no sabíamos transmitirlo".
Después de un año y dos PAE, pasaron de campañas sin rumbo a métricas claras.
De contenido desordenado a una voz auténtica.
De envíos aislados a un email marketing que vende.
Y todo eso, sin perder el foco en lo que los motivó a emprender: construir una comunidad en movimiento.
Hoy venden más.
Pero lo más importante es que lo hacen con propósito, con estrategia y con confianza en lo que están creando.
Que esta historia te inspire para seguir.
Buen domingo,
Rodri
No hay comentarios:
Publicar un comentario