¿Te pasa? Es normal.
Especialmente si ya lo hiciste antes y no funcionó.
Pero en la mayoría de los casos, el problema no fue la inversión.
Fue no tener claridad.
No saber cuánto era mucho o poco.
No entender si una campaña funcionaba o no.
No tener una estructura que sostenga esa inversión.
Invertir sin métricas es como manejar con los ojos cerrados.
Puede salir bien… pero es pura suerte.
Por eso, si estás en esa etapa, este es el mejor momento para frenar y pensar.
Porque la publicidad funciona, sí.
Pero solo si hay una tienda que convierte.
Una oferta que vale la pena.
Un contenido que habla el idioma del cliente.
Hace poco publicamos una actualización de la especialización en Meta Ads y está pensado especialmente para eso:
Para que no inviertas a ciegas.
Y si sentís que es momento de tomar decisiones con más criterio y menos ansiedad, agendá una llamada hoy mismo.
Espero verte pronto,
Rodri.
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